buscando ilusiones

miércoles, julio 12, 2006

Berlin

Berlín, ciudad que huele a historia por todas partes, por cada esquina, calle, tienda o plaza. Con señales de ello por todas partes. Las guerras mundiales, el muro, los genocidios. Tantas historias, y tantas anécdotas en cada sitio y momento. Su gente, seria, pero amable y agradable. Y la comida, genial, no de la calidad y variedad de la española o francesa, pero si de la rapidez de la inglesa o americana. Comida rápida, y de calidad. Mucha marcha, tantos barrios para salir como Madrid. Me encanto. Lo único malo, el idioma.

Es una ciudad en obras, vayas donde vayas, hay obras, o están limpiando, o están construyendo. Hay muchas cosas terminadas, por eso ese aire de mezcla de edificios antiguos con otros de un corte mucho más futurista y moderno que me encanta. En definitiva, una ciudad que me ha gustado mucho y que definitivamente tengo que explorar mas. Lo mejor es que tiene todo unos precios razonablemente buenos como para ser una capital europea.

La compañía con la que iba ha estado bien, hemos charlado largo y tendido, pero su mezcla polaco/alemana ha hecho que su conocimiento de la historia del país no estuviese muy desarrollada, y su extrema vagueza en traducirme cosas del alemán haya hecho que no me enterase de todo lo que podía. Pero en general bien. Me lo he pasado muy bien.

Salimos el viernes de madrugada (transportes londinenses de los cojones), para coger el avión por la mañana muy temprano. Al llegar allí, durmiéndome por cada esquina del aeropuerto y avión, que por cierto, un día voy a escribir un post para quejarme de todas las putadas de los aeropuertos!.
Pues eso, al llegar allí.... shock! Me paso una cosa que no me había pasado nunca, y claro, lo había pensado, pero no había pensado que me afectaría tanto. Shock cultural! No entendía nada de su lenguaje!, mierda de alemán!, como iríais a cualquier sitio, si no conoces la ciudad, no entiendes ningún cartel y no le puedes preguntar a nadie?! Dioooos!, no me quiero imaginar lo que puede ser ir a Arabia, Japón o China..... Mi amiga a la velocidad de la luz iba corriendo, de un lado a otro, preguntándole a unos y otros, como poder ir al centro. Menos mal que iba con alguien del país que conoce bien el idioma, me sentía totalmente inútil!, sino no se lo que hubiera sido de mi! Todo viejos!, nadie hablaba ingles! Allí solo hablan ingles los jóvenes, y no había en esos momentos de la mañana!. Al menos fue la sensación que tuve durante todo el viaje.

Después de una horilla hasta el centro, estábamos en el hotel soltando lastre, para después disponernos a patear la ciudad todo lo más posible. Con las prisas me entro hambre y descubrí una cosa que no iba a parar de hacer en todo el viaje, comer salchichas! Están por todas partes, puestecitos, tiendas, restaurantes, en cualquier parte te las venden, son súper baratas y están riquísimas, las mejores que he probado en mi vida! Un trozo de pan, y una salchicha que mas quisiera Rocco Sifreddi, por dos euros! Genial! Las venden hasta en las farmacias! (es broma)

Lo demás, monumentos a punta pala, el río súper bonito, con montones de edificios a su orilla que parecen que van a caer en el, multitud de puentes, el centro, las calles y el parque alrededor de la puerta de brandenburgo, la torre de la victoria, los parques, el muro, el checkpoint charlie. Todo rebosante de historia. Todo tiene algo para contar. Desde las historias reales, a los testimonios de la gente en los museos, a lo que ocurrió. A lo que cuentan las calles, y a sus museos. Prisioneros, judíos, pobres, soldados o berlineses, del este u oeste. Me quedo con las partes referentes a la segunda guerra mundial y sus consecuencias, sus parques, y toda la zona de la puerta brandenburgo. Y la comida!

Otra cosa a tener en cuenta en Berlín son los transportes. Además de los típicos cercanías, metro, autobuses y taxis, añadimos las bicicletas. Hay muchas de pago aparcadas por todas partes, y estuvimos a punto de alquilarlas un par de veces, que mala es la pereza. Tienen unos códigos, que llamando a un numero y pagando te dicen la clave, y a correr! el metro y el cercanías están abiertos hasta las tantas, por no decir casi toda la noche, genial para volver a casa cuando sales de marcha. Aprende Londres! Y lo mas importante, el metro y el cercanías, es gratis!!!! Bueno, esto no es del todo cierto, lo que pasa es que no existen barreras, y puedes entrar perfectamente por donde quieras. Me costo alguna discusión, por que claro, a que kinki como yo no se le ocurre viajar sin pagar cuando parece que te van a pegar si no te cuelas. Ella quería pagar por que decía que había revisores. Resultado, discusión, y yo no vi ningún revisor en todos los días que estuve alli. Será por que pagué, y la ley de murphy hace mucho. No pagad.

Para salir de marcha esta muy bien, yo en las dos zonas que estuve, me lo pase genial, cenita multinacional con restaurantes de todas partes a elegir. Tenéis marcha pija, underground, kinki, alternativa. Abierto a todos los públicos. Hay un montón de publicaciones gratuitas por todas partes hablando de las zonas, conciertos, y demas, pero bueno, como sabéis eso lo tienen muchas capitales europeas. Luego fuimos a un par de garitos a entrar en calor tomando unas copichuelas, uno alternativo que daba un poco de repelus, y otro que era en una zona de un puente con arcos, es los que por debajo del puente, que era para el tren, en cada arco habían puesto un garito. Con unas chicas impresionantes, tanto, que bailando en la pista mi amiga me decía, - si quieres vete a bailar con ellas!. Juas, es que eran muy guapas.

Me encantaría volver, y hasta me pensaría ir un tiempo a vivir allí, si no fuera por el idioma. A ver si encuentro alguien que conozca bien la ciudad, que le lleve un finde largo a explorar bien los bajos undergrounds de la ciudad.

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